La meditación para la alegría de vivir te ayuda a liberar las emociones negativas y a centrarte en lo positivo. Te permite reconectar con tu fuente interior de alegría, abriendo tu corazón a la felicidad y la satisfacción en cada momento.
Busca un lugar tranquilo y siéntate cómodamente, con la espalda recta. Cierra los ojos y concéntrate en tu respiración. Permítete sentir alegría en tu cuerpo, empezando poco a poco, con gratitud por lo que tienes. Imagina que la alegría te llena el cuerpo con cada inhalación, y con cada exhalación, todas las preocupaciones y el estrés desaparecen. Empieza con 5 minutos al día y aumenta el tiempo gradualmente. La práctica regular te ayuda a recuperar la alegría en cada momento de tu vida.