El yoga para un sueño profundo ayuda a preparar el cuerpo y el sistema nervioso para un descanso profundo y reparador.
Es durante un sueño profundo y sin sueños que el cuerpo recupera completamente sus fuerzas y normaliza el funcionamiento de los sistemas nervioso, hormonal y endocrino. Sin embargo, sin suficiente actividad física, la relajación puede resultar difícil, lo que afecta negativamente la calidad del sueño.
Estos ejercicios ayudan a aliviar la tensión, distribuyen uniformemente la carga muscular e inician procesos de relajación. Tras la práctica, el cuerpo se calma más rápidamente, resulta más fácil conciliar el sueño y despertarse renovado y con energía.
Las sesiones cortas son perfectas para aliviar el estrés rápidamente antes de acostarse, mientras que las más largas trabajan más profundamente en el cuerpo y crean una sensación de rejuvenecimiento completo.