Técnica de ejecución
Junta las piernas. Dóblalas. Impulsándote con los brazos y la pelvis, mueve lentamente los pies detrás de la cabeza. Presiona los dedos de los pies contra el suelo. Mantén las piernas lo más rectas posible. Evita el dolor. Separa los pies. Dobla las piernas. Relaja las caderas. Baja las rodillas hacia las orejas. Coloca las manos detrás de la espalda, paralelas. Respira de 5 a 7 veces. Estira el cuello. Respira de forma uniforme y tranquila. Luego, estira las piernas. Junta los pies. Dobla las rodillas. Apoyando la zona lumbar con las manos, baja lentamente la espalda hasta el suelo, vértebra por vértebra. Vuelve a la posición de dormir.